Cómo plantear las nuevas metas de un nuevo año.

Año par que se nos viene. Año, como todos, con muchas expectativas,  metas y deseos. Sobre todo, espero que sea un año con muchas metas, pero metas reales, no metas zoombies. Para mí y para todos.

Este año, a diferencia de otros años, he decidido que quiero lograr sólo 3 cosas. Recientemente lei un muy buen artículo que me lo puso en perspectiva, y me recordó el libro Good to Great de Jim Collins, en el que dice “si tienes más de 3 prioridades no tienes ninguna”.  Aunque solemos tener el impulso de apuntarnos a varias metas al inicio del año, no nos damos cuenta del poco tiempo que realmente tenemos para ejecutarlas. Entonces, estos primeros días de Enero el hábito que estoy desarrollando es el de resistir abrir nuevos frentes. Ya tengo suficientes. Voy a hacer como mi propuesta de leyes para congresos: por cada ley nueva una ley antigua debe irse.

De modo que este año sólo tengo tres metas. Un par de ellas serán completadas antes de que el año termine, lo que dará lugar a otras dos que llenarán su lugar. Esto no quiere decir que este año trabajaré tan sólo en 3 cosas, lo que implica es que en caso de duda, o en caso de eliminación siempre, tendrán prioridades estas tres metas.

En este mismo artículo  leí otra idea de la que me llamó mucho la atención:  “las cosas pequeñas cuando no se corrigen se convierten en cosas grandes. Siempre.” Luego de meditarlo mucho las últimas semanas del año pasado, he decidido nombrar al 2018 como un año de “course correct”. No porque haya muchas cosas que estén muy desviadas, sino porque hay muchas cosas que he dejado que pierdan su curso y no lo he corregido.

Como siempre, todo esto debe estarse formando sobre hábitos si es que es algo que será a largo plazo. Estas primeras semanas de enero estaré repasando mucho el tema de formación y consolidación de hábitos, porque es en base a hábitos que se construye la auto-disciplina que permite la libertad de elegir una vida mejor.