Las plataformas, cuando nos referimos a ellas como un modelo de negocio, han existido desde hace mucho tiempo en las sociedades humanas. Un mercado, en su versión más sencilla, cumple los requisitos de una plataforma: es un modelo de negocio, tiene una estructura de plug-and-play, y une proveedores con productores, obteniendo un beneficio en el proceso (en el caso del mercado o bazar, el alquiler o el precio por ser parte del bazar).
Muchos de los grandes imperios de la Historia pueden verse también como una mega-plataforma. Las pequeñas comunidades se unían a el e intercambiaban seguridad por materia prima (aunque no siempre de manera voluntaria). Durante siglos, este era el único tipo de plataformas que podían existir.
Luego vino la revolución industrial. Con ella vino el concepto de producción en masa y líneas de producción que abrieron las puertas a crear productos cada vez más baratos y en cantidades mayores. Las ciudades aparecen como plataformas, para los que dan y los que buscan trabajo. Durante los últimos dos siglos (hasta hace unos 50 años) este era el concepto básico de plataforma. A partir de la Segunda Guerra Mundial vinieron nuevas tecnologías que propiciaron el suelo fértil para que las plataformas se multipliquen, y en un artículo posterior veremos como las plataformas han creado nuevas economías que están reemplazando a las economías de producción en masa.
Una de las primeras plataformas que aparece con la tecnología, hace poco más de un siglo es el teléfono y los telegramas. Aparece uno, luego otro, luego otro. De pronto aparece un conjunto de personas conectadas a la red telefónica, la plataforma. En ella todos son usuarios y consumidores al mismo tiempo. Aparece el tren, que puede verse como otra plataforma, que permite intercambio de valores entre proveedores y consumidores.
Ya un poco más cerca aparecen redes más sofisticadas, como las tarjetas de crédito. Las tarjetas de crédito nacen como programas de lealtad que buscan unir proveedores con consumidores. Hasta hoy forman una de las plataformas más rentables del planeta.
Con Internet aparecen plataformas antes impensables. Vinieron muchas, y vinieron a tomar el mercado. Hoy, las 3 compañías más grandes del mundo, son compañías de plataformas (Apple, Amazon, Google, Microsoft, Facebook, eBay, etc.). Cambiaron y cambiarán la economía para siempre. El mercado en el que aparecen es relevante, por ejemplo las más grandes son estadounidenses, porque tienen la ventaja de tener un idioma y un mercado común, y eso les permite desarrollarse a un punto donde la competencia es muy difícil.
Muchos productos, como veremos en otros artículos, se han ido convirtiendo en plataformas, y muchos que no lo hagan dejarás de existir. También exploraremos el concepto de efectos de red, que hace que las plataformas sean tan exitosas en tan corto tiempo.
El advenimiento masivo de Internet y tecnologías móviles (hoy lideradas por móviles, pero pronto serán tomadas por IoT y realidad virtual) han cambiado el concepto de economía. Estamos en ese proceso, aun lo estamos entendiendo. Vienen otras tecnologías, como la inteligencia artificial y blockchain, que traerán nuevos, y más voraces cambios, para los que hemos de irnos preparando, porque traen cosas buenas pero algunas un tanto peligrosas.