Se acercan la convocatoria a elecciones del TSE y poco a poco comienza a tomar forma el panorama electoral para las elecciones de este año. Lastimosamente esta parece que será tan sólo una elección más, sin propuestas nuevas y con unos matices bastante especiales por la intención de Sandra Torres de postularse como candidata. Dejando de lado la inconstitucionalidad -y tal vez delito- de esta pretensión, el panorama -con o sin ella- deja verse muy desolador para los ciudadanos guatemaltecos que en septiembre -y seguramente en noviembre- estaremos emitiendo mi voto.
GTD para atletas de la información
Desde hace un par de meses he estado implementando GTD (Getting Things Done)como estrategia para ordenar mis tareas pendientes. Mi herramienta fundamental ha sido Evernote, aunque un amigo terminó de desarrollar una aplicación bastante interesante que comenzaré a utilizar en estos días. Cuando tenga un poco más de tiempo escribiré un artículo más extenso sobre el tema, porque creo que es un modo bastante eficiente de organizar las tareas que uno día a día necesita -quiere- completar.
Hagamos más siesta!
Acabo de leer un interesante libro llamado “Brain Rules”. Uno de los temas que el libro enfoca repetidamente es el del sueño, y de cómo el sueño es un factor que en nuestra sociedad ha quedado totalmente relegado a un segundo plano. Como todo lo referente al cerebro -desde su anatomía hasta la psicología- el sueño es un tema que me intriga mucho. El primer enfoque que el autor da me parece interesante: el ser humano es un mamífero bastante vulnerable a ser cazado. No somos rápidos, no vemos de lejos, no tenemos garras, no tenemos grandes colmillos, no nadamos bien, no trepamos bien. Desde un punto de vista biológico nuestros antepasados eran equivalentes a venaditos en la gran sabana africana. Aparte de eso dormimos mucho -el comportamiento ideal para nuestros predadores-. Entonces, si esto es así, debe existir una razón evolutiva bastante fuerte para que durmamos. Y de hecho existe: durante la noche las conexiones neuronales en el hipocampo se “asientan” y fortalecen, con lo que nuestros conocimientos del día pasan a un estado un poco más estable (casi todo lo que experimentamos lo olvidamos). Sencillamente cuando dormimos, aprendemos.
Nuevo Guisho
Después de pensarlo bien he decidido darle vida de nuevo a esta necesidad interna de compartir ideas a través de la palabra escrita. Un nuevo enfoque, posts más cortos y con mayor frecuencia. ¿Por qué? Por que me da la gana, porque tengo ganas de escribir, porque me hace bien escribir -me relaja, ordena mis ideas-.
Los años han pasado desde que escribí mi primer post en el 2005 (siempre queda vivo blog.guisho.com) y durante ese tiempo el mundo que me rodea y yo hemos cambiado. Algo de madurez ha tocado mis fibras internas, y en algunas cosas he recuperado mis curiosidad de niño. Lo curioso es que los temas que me intrigan e interesan se mantienen hasta cierto punto los mismos. Una vez conversaba con un amigo y le exponía mi preocupación -o incluso frustración- de tener la sensación de que sentía que le daba vueltas y vueltas a las mismas cosas. Con su sabiduría cotidiana, mi amigo me dice: “claro que seguís dando vueltas y vueltas, pero estás dando vueltas en espiral: cada vez que regresas al mismo punto estás un poco más arriba.” Así que espero este sea un nuevo escalón en ese proceso, en esa búsqueda, en esa batalla, en ese partido, en esa locura, en ese camino que llamo conocimiento.
Así que bienvenidos. ¿Por qué el nombre? En otro post tal vez lo explique.